Tatuajes para dar felicidad a los niños enfermos

Tatuajes para dar felicidad a los niños enfermos

Escrito por: Sacra    31 mayo 2016     2 minutos

Por desgracia son muchos los niños en el mundo que tienen que pasar por el doloroso trance de una enfermedad. Si para los adultos resulta una experiencia amarga, para los pequeños lo es mucho más, consiguiendo que se convierta en una de esas vivencias que acaban marcando sus vidas para siempre. Afortunadamente, en los últimos tiempos, muchos movimientos de animación, diversión y distintas organizaciones no gubernamentales, han tenido la feliz idea de crear espacios, actividades y mucha diversión para que los niños hospitalizados tengan una estancia mucho más agradable. Y es que la diversión también ayuda a la recuperación.

Y algo así es lo que ha pensado el artista neozelandés, Benjamín Lloid, cuando ha puesto en marcha toda su imaginación para ayudar a los niños enfermos tatuándoles distintos dibujos en sus cuerpos. Algo que ha tenido enorme éxito haciendo que se sientan mucho más felices.

Benjamín Lloid es un artista de Nueva Zelanda que lleva años utilizando el aerógrafo para realizar tatuajes. No se trata de tatuajes permanentes, por lo que al cabo de un tiempo acaban desapareciendo, la tinta que utiliza es totalmente orgánica así que no tiene ninguna repercusión negativa en la piel.

La idea le surgió cuando su hijastro, de 7 años, al que solía realizar estos bonitos dibujos, acabó falleciendo debido a una dolorosa enfermedad. Es entonces cuando se le ocurrió hacerle un tatuaje al hijo de un amigo y subir la foto a una red social (Facebook) con la promesa de que si conseguía 50 «me gusta», iría al hospital a tatuar a todos los niños enfermos que quisieran.

La cifra no fue de 50 si no que, a la mañana siguiente, ya tenía, nada más ni nada menos que 400 mil «me gusta». Es así como Benjamín tuvo que cumplir su promesa y acudir al Hospital de Salud Infantil Starship para hacer sus tatuajes a todos aquellos niños que lo quisieran, el único precio que les cobra es una sonrisa.

Vía | El Comercio
Foto | Facebook


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