Cuidados especiales para los resfriados infantiles

Cuidados especiales para los resfriados infantiles

Escrito por: Sacra    24 noviembre 2015     2 minutos

Es normal que con estos cambios de tiempo, el descenso de las temperaturas de forma drástica y la entrada, de lleno, al invierno, todos nos sintamos destemplados, nos invadan los mocos y las toses, incluso algún ligero malestar. Pero si ya los adultos no somos invencibles ante el ataque de los virus, mucho menos los niños.

Por regla general, los niños sanos suelen pasar de 7 a 14 resfriados a lo largo del año. Se trata de episodios pasajeros en los que aparecen los síntomas normales de cualquier constipado y que también tienen su parte útil, ya que servirán para que el sistema inmunológico se fortalezca, preparándose para futuras invasiones víricas. Irritación de garganta, toses, mocos y algo de fiebre, suelen ser los síntomas que aparecen en los resfriados infantiles. Pero ¿cómo podemos aliviarlos?

Como siempre decimos, lo mejor es que lo valore tu pediatra y determine si es necesario recetarle algún medicamento que le alivie las molestias. Al tratarse de una infección vírica no es necesario tratar con antibióticos e irá mejorando, de forma natural, al cabo de cuatro o cinco días.

Lo que suele resultar más molesto, en estos casos, es la tos, que puede venir bien por una infección en la garganta o por la acumulación de mocos que le hacen más dificultosa la respiración. Para ello lo mejor es que esté bien hidratado, el líquido le ayudará a disolver los mocos y expulsarlos con mayor facilidad. Para esto también viene estupendamente el suero fisiológico con el que le haremos lavados por la nariz para despejar las vías respiratorias.

Tranquilidad en casa, algo de reposo y mucha vitamina C, pueden ser los aliados perfectos para que esos días sean más llevaderos. Pero no debemos olvidar que en algunos casos los resfriados se pueden complicar. Debes acudir al pediatra si se queja de dolor de oídos, aumenta la dificultad para respirar, si la fiebre no remite y es mayor de 39,5 grados, si no disminuye la tos, o se encuentra excesivamente decaído.

Vía | Hoy
Foto | En familia


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