Los libros y la literatura infantil nos pueden servir, además de para divertir a nuestros niños, también para hacerles ver y comprender ciertos aspectos que nos pueden resultar un tanto complicados de explicar. La propia identidad, valorarse a uno mismo o no dejarse llevar por las opiniones de los demás, son pequeños, o grandes, lastres que arrastramos desde la infancia si no somos capaces de entenderlos desde nuestros primeros años.
Una de las primeras habilidades que nuestro niño va a realizar desde bien pequeño es la de dibujar. Tomar los lápices de colores y dejarse llevar por todo un mundo de sensaciones es una de las prácticas más divertidas que podemos ofrecerles desde muy temprana edad. Aunque bien pudiera parecer que se trata de un ejercicio arbitrario y sin ningún sentido más allá del propio garabato, lo cierto es que tras esos trazos se esconde mucha información para conocer la evolución y desarrollo de nuestro hijo.
El ser humano es un ser volitivo e intelectual. Por un lado, tiene sentimientos y emociones que en parte determinan su conducta y su modo de ver el mundo. Por este motivo, es tan importante que los niños se sientan integrados, valorados y queridos por sus compañeros de colegio y también por los profesores. Las consecuencias de la exclusión social son enormes sobre la autoestima.