La postura correcta para escribir

La postura correcta para escribir

Escrito por: Sacra    20 abril 2010     2 minutos

Además de aprender las letras, su orden y su grafía correcta, nuestros niños deben aprender a adoptar una postura adecuada en su silla de trabajo siempre que vayan a escribir. No debemos olvidar que las anomalías u errores que se asimilan a edades tempranas ya son muy difíciles de corregir en la edad adulta por lo que debemos llevar especial cuidado en enseñarles y corregirles siempre que veamos una mala posición delante de sus deberes escolares.

A menudo sucede que el cansancio o el aburrimiento les hacen vencerse y echarse sobre la mesa encima de sus tareas. Aunque en un momento dado te pueda parecer exagerado, lo mejor es que le observes y rectifiques su postura, piensa que también ésta va a influir en el rendimiento escolar de tu hijo. A continuación te damos algunas pistas para que tu hijo se sienta cómodo y dispuesto a adoptar una buena disposición al estudio.

El escritorio o mesa que utilicemos para sus tareas debe tener una altura adecuada. La espalda debe estar erguida por lo que debemos utilizar una silla con respaldo, apoyándola en él para su mejor comodidad. Los pies del niño deben reposar en el suelo y los codos flexionados deben llegar a la mesa.

Si el niño es zurdo los libros y cuadernos deben colocarse en la parte derecha de la mesa, al contrario si es diestro. El peso del cuerpo ha de situarse en el lado que no se escribe.

Cuando el niño empiece a escribir debe tener el brazo y la muñeca apoyada en la mesa. Es importante, también, observar el modo de coger el lápiz, así como la presión que ejerce en el papel a la hora de trazar las distintas letras.

Con estos pequeños consejos no sólo se verá beneficiada su espalda y columna vertebral, si no que está demostrado que un niño que adopta una postura correcta a la hora de realizar sus trabajos es más hábil en el proceso de aprendizaje de la lectura y escritura, así como está más capacitado para la asimilación de nuevos conceptos ya que consigue mantener alerta su atención.

Vía | Cuidado Infantil


13 comentarios

  1. ***carolina balentina*** dice:

    siempre devemos terner una postura adecuada para escribir xq si no la tenemos podemos tener malos resultados al tiempo como:sufrir de la colugna o de la espalda….etc..***

    • Anonimo dice:

      Si también podemos tener problemas con la ortografía, un claro ejemplo eres tu… «colugna» «devemos» «terner» «xq»

  2. loli dice:

    s bueno

  3. Ederlyn Piñero dice:

    super aprender la postura

  4. Sacra dice:

    De eso se trata, amigas, de que la postura sea la correcta para evitar problemas físicos posteriores. Nos gusta que os guste. Un saludo para las tres.

  5. Jana dice:

    Según dicen los expertos en ergonomía, los niños no pueden mantener una postura erguida sino utilizan un atril inclinado, ¿conocéis la existencia de atriles para escribir?

    • Sacra dice:

      Jana, más que un atril lo que se utilizó durante mucho tiempo en las escuelas o en los pupitres infantiles era la tabla inclinada de la mesa, en vez de la horizontal. Pero no sé hasta que punto eran prácticos, beneficiosos o necesarios. El atril, como elemento anexo a la mesa, siempre se ha utilizado, y se utiliza, para la lectura, pero en la escritura lo veo un tanto complicado. De todos modos, cualquier idea que sea beneficiosa para los niños es siempre bien recibida. Gracias por tu comentario.

      • Jana dice:

        Muchas gracias Sacra por tu explicación, por lo que yo sé mis padres estudiaron en una mesa inclinada, y según he oído eso favorece el que puedan mantener esa buena postura de la que habla el artículo. Además me suena que ya desde antiguo los monjes y compositores utilizaban mesas inclinadas para escribir (supongo que pasaban largo tiempo escribiendo) y esto me crea la duda de si las mesas actuales horizontales no son peores que las mesas con inclinación que tenían nuestros padres, ¿sabes algo sobre este cambio del mobiliario? quizás se cambiaron por un tema económico sin pensar en la repercusión en la salud que conllevaría con el tiempo. Lo que he leído en un foro de ergonomía es que si el plano de trabajo no tiene una inclinación mínima, los ojos dan la orden al cerebro para conseguir el ángulo adequado y eso hace que nuestro cuerpo tienda a aproximarse al pupitre y fuerce la postura. Me gustó lo que dijo una vez un especialista como ejemplo, dijo que cuando tú coges un periódico o libro para leer, tus manos no lo ponen en horizontal sino que te lo sujetas inclinado, y esto es debido al ángulo óptimo de vision de nuestros ojos que inconscientemente nuestro cerebro da la orden para que esto suceda, y eso da mucho que pensar ¿verdad??

      • Sacra dice:

        Tienes toda la razón Jana, yo también desconozco cuales han sido los motivos para cambiar la inclinación de las mesas de trabajo, supongo (y espero) que haya sido para mejor beneficio de los estudiantes, sobre todo para los más pequeños que están formado su cuerpo todavía. Intentaremos seguir investigando. Un saludo y gracias por tus palabras.

  6. maria fernanda dice:

    buenas noches sacra me sivio tu repuesta y quisiera preguntarte el porque no debemos escribir con tensión muchas gracias

  7. Sacra dice:

    Maria Fernanda, no creo haber dicho nada sobre la tensión a la hora de escribir. De todos modos yo creo que para enfrentarnos, o en este caso los niños, enfrentarse a sus tareas de escritura o escolares, lo mejor es que estén relajados y en un ambiente favorable. La tensión, los nervios, la angustia aún puede provocar muchos más problemas en su organismo. ¿No te parece?
    Un saludo.

  8. deisy mendoza dice:

    BUENAS TARDES AMIGA COMO PUEDO AYUDAR A MI HIJO PARA QUE ADOPTE LA POSICION CORRECTA AL ESCRIBIR YA QUE EL AGARRA EL LAPIZ ENTRE LAZADO CON LOS DEDOS INDICE, MEDIO Y PULGAR AGRADESCO SU AYUDA

    • Sacra dice:

      Deisy Mendoza,
      generalmente esos vicios a la hora de coger el lápiz se corrigen insistiendo mucho. En otras ocasiones se les pasa con el tiempo. Pero lo mejor, sin duda, es la paciencia e ir corrigiéndole cada vez que lo veas.
      Un saludo.