La firma británica de sillitas de paseo MacLaren ha emitido un comunicado en el que anuncia la retirada del mercado estadounidense de cerca de un millón de sillitas de paseo para niños tras haber sido informados de algunos accidentes ocurrido en las manos de los más pequeños de la casa.
La causa principal de consultas de emergencia y hospitalización de menores de cinco años, son las quemaduras; una pequeña fracción de estas quemaduras, se refieren a descuidos en el uso del agua corriente. Según el reciente estudio del Centro del Quemado de la Universidad de Chicago, la mayor parte de las quemaduras se deben al derrame de sustancias calientes, muchas de ellas, saliendo del microondas.
En los hoteles se cambia frecuentemente de director porque con el tiempo se deja de ver la mancha en la alfombra. Eso mismo parece que nos ocurre a los padres respecto a los lugares peligrosos de la casa, los tenemos tan vistos que no reparamos en ellos. Según un estudio que se publicará en Accident Analysis and Prevention los padres identificaron menos de la mitad de los peligros potenciales para los bebés en casa. Aunque profesionales sanitarios y trabajadores de guardería identificaron bastantes menos.
Hace unos días se ha presentado un informe realizado por el Observatorio de la salud de la infancia y la adolescencia Faros e impulsado por el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona que arroja una cifra, bastante alarmante, en los accidentes mortales en la infancia.
El buen tiempo invita a salir de casa, los niños se mueven mucho más e incluyen el agua en sus juegos. Tanta actividad a veces tiene consecuencias negativas cuando sucede un accidente. En esta época del año muchos niños sufren golpes leves, contusiones, quemaduras y fracturas de hueso. La mayoría sin trascendencia. Sin embargo un 42 por ciento de los accidentes mortales entre niños ocurren en verano.
Según un estudio publicado en la edición online de la revista Clinical Pediatrics, en Estados Unidos se trata unos 15000 niños anualmente en urgencias, debido a las lesiones provocadas por la caída de algún mueble. De ellos 300 mueren por esas heridas. Desde los años 90 las cifras han aumentado en un 41 por ciento.
A partir de que nuestros bebés empiezan a gatear, se inicia el proceso de la autonomía y pueden correr más peligros de los esperados. Las casas suelen ser el lugar idóneo para que, pequeños o grandes accidentes se produzcan en una milésima de segundo. Ya comentamos anteriormente algunas consideraciones a tener en cuenta, así como la necesidad de tener un botiquín en casa para las emergencias.
Hasta los 7 u 8 meses los movimientos de nuestro bebé están limitados. Mueven sus brazos, sus piernas, intentan coger alguna cosa con sus manos pero, normalmente, su mundo se reduce a un espacio concreto donde los tenemos, más o menos controlados. A partir de esa edad es cuando nuestro pequeño intenta descubrir el mundo con total libertad. Empiezan a gatear, los primeros pasos y nuestro hogar se convierte en un enorme parque de atracciones para su inagotable curiosidad.
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