Parece ser que la recesión económica está maltratando también a las neveras de las familias y por ende a los propios miembros de la familia y sus hábitos alimenticios. Se están abandonando las verduras, las hortalizas, las frutas o los pescados por comidas menos recomendables que están haciendo crecer los índices de obesidad en los niños.
De todos es sabido que, en tiempos de crisis, lo más adecuado es aquello de prescindir de lo superfluo, pequeños o grandes lujos, caprichos que hacen que nuestra económica sufra las graves consecuencias de una inestabilidad, más o menos, peligrosa. Cuando la recesión económica llega a nuestra cuenta corriente es momento de cerrar la cartera y esperar a que pase el vendaval.
Ni siquiera ha llegado a ver la luz del sol y ya se convierte en el centro de atención principal para los gastos de la casa. "A mi niño que no le falte de nada y si es lo último de lo último, muchísimo mejor". Evidentemente eso es lo que quisiéramos todos los padres aunque, una gran mayoría, debemos ir ajustándonos según el bolsillo y las posibilidades que la vida nos brinda en cada momento.
Hace unos días os contábamos que el popular teleñeco rojo, Elmo, iba a enseñar a los niños sobre como prevenir la gripe A. Debe tener mucho éxito porque su siguiente clase es como adaptarse a la crisis y está dirigida a los niños pero también a sus padres.
Como muchos de vosotros sabéis son muchos los productos con los que tienen que hacerse los padres ante la llegada al mundo de un nuevo miembro de la familia. De hecho, ya os contamos que el 70 por ciento de la ayuda estatal de los 2.500 euros se va nada más nacer el bebé.
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