Consejos para evitar el contagio de piojos en los niños

Consejos para evitar el contagio de piojos en los niños

Escrito por: Sacra    5 noviembre 2014     2 minutos

Uno de los temas de salud que va unido, inevitablemente, a la vuelta al cole o a la guardería, es la pediculosis o el contagio de piojos en los niños. Por mucho que queramos evitarlo, incluso extremando la limpieza del cabello de nuestro hijo, resulta casi imposible que los niños salgan ilesos a esta invasión. Aunque no ocurre en todos los niños igual, algo que sigue estando envuelto en un gran misterio, pocos son los que se salvan.

Así que no os extrañéis si junto a los libros y tareas para hacer en casa, los peques os entregan un papel de la dirección del centro escolar pidiendo vuestra colaboración para observar más detenidamente el cabello de vuestro niño. Pero ¿qué podemos hacer? Aquí os dejo algunos consejos que, quizás, os puedan servir.

  • Lo primero es, al menos una vez por semana, observar con detenimiento el cabello de tu hijo, sobre todo si ya te han advertido que en el colegio se ha detectado algún caso o si ha aparecido algún otro dentro del entorno familiar. Una señal bastante fiable, es ver a tu niño rascarse con frecuencia el cuero cabelludo.
  • Para que te sea mucho más fácil detectarlos o eliminarlos, puedes usar una liendrera, se trata de un peine con unas púas especiales que al peinar a tu niño saldrán con relativa facilidad. Las venden en las farmacias y grandes almacenes.
  • Siempre puedes preguntar a tu pediatra, pero en la farmacia te pueden informar sobre tratamientos, cada vez más eficaces, para prevenir el contagio. La mayoría de ellos es con el cabello seco, por lo que te resultará más fácil.
  • Es importante que avises al niño para que no comparta ciertas prendas con los compañeros, especialmente si existe riesgo de contagio: gorros, diademas, sombreros, bufandas… ahí es donde suelen ocultarse estos temidos bichitos.
  • Si hemos tenido contagio y hemos conseguido acabar con los piojos de su cabello, ahora tenemos que lavar en profundidad la ropa, sábanas, toallas y todo aquello que haya podido estar en contacto con el niño infectado. Los piojos no soportan el calor, así que cuanto más caliente, mucho mejor.
  • Los peines los lavaremos bien con agua muy caliente y si ha estado en contacto con objetos que no se pueden lavar, los meteremos en una bolsa cerrada durante 4 o 5 días, de esta forma si ha quedado alguna larva acabará muriendo.

Vía | Ser Padres
Foto | Guía Infantil