Ser solidarios (III)

Ser solidarios (III)

Escrito por: Leticia   @leticiadelpino    20 agosto 2010     2 minutos

Seguimos reflexionando sobre la solidaridad junto con nuestros pequeños.

En la escuela también aparecen muchas oportunidades para aprender a ser solidarios con los demás: cuando alguien se lastima, cuando hay que explicarle la tarea, al participar en un trabajo en equipo, algunos de los ejemplos que te podemos dar. Seguramente a tí se te ocurrirán muchas actitudes solidarias más que ocurren.

Podemos ser solidarios con la familia, con los amigos, con el vecino, con los compañeros, pero también podemos serlo con gente que se encuentran en lugares muy distantes, hablan distintos idiomas y tienen costumbres diferentes. Es la manera en que los pueblos se unen y se sienten hermanados entre sí.

Muchas veces, diferentes organismos o instituciones organizan campañas solidarias para ayudar a personas que están sufriendo problemas graves. Generalmente recolectan ropa, alimentos, dinero, juguetes. Quizás te cueste desprenderte de algunas cosas, pero es una oportunidad para que nuestra solidaridad recorra un camino nuevo.

Hay actitudes en la vida que nos impide ser solidarios. El egoísmo, que nos lleva a pensar y actuar como si nuestro propio bienestar estuviera antes que el de los demás. La ignorancia, que no deja ver los graves problemas que hay en el mundo y que nosotros podemos contribuir a resolver. La pereza: dejar para mañana lo que podemos hacer hoy. Creer que lo que no nos afecta directamente, no nos interesa.

Te brindaremos algunos pensamientos solidarios: si dejamos pasar la oportunidad de ayudar a alguien, si solamente nos preocupamos por nuestras cosas, poco a poco nos vamos quedando solos. Ser solidario no es dar lo que nos sobra sino compartir lo que tenemos. Las personas que son solidarias no niegan su ayuda a quienes no lo son.

Fuente | Colección Valores
Foto | Flickr – Luis Beltran