Toy Story Playland: Hasta París y más allá…

Toy Story Playland: Hasta París y más allá…

Escrito por: Mónica M. Bernardo    6 septiembre 2010     2 minutos

Toy Story es uno de los éxitos más grandes de Disney en los últimos tiempos. Si los juguetes de Andy han arrasado en la taquilla en sus tres dimensiones este verano, los muñecos, peluches y demás merchandising no se han quedado atrás. Ahora os contamos que los muñecos más famosos de la gran pantalla acaban de hacerse realidad en Playland.

Se trata de una enorme caja de juguetes ubicada en uno de los parques de atracciones más grande de Europa: Disneyland París. Allí el visitante se sentirá un pequeño juguete en manos de Woddy, Buzz, Jesie y compañía. ¡¡Hasta París y más allá!! Más abajo podrás ver un vídeo con un paseo por Toy Story Playland.

No hace mucho de su inauguración y ya se ha convertido en uno de los principales reclamos del famoso parque de atracciones radicado en las cercanías de la capital del Sena. Un espacio que recrea el jardín de Andy y que acoge tres nuevas atracciones para pequeños y grandes y un enorme espacio de juegos y aventuras.

La bienvenida la ofrece un Buzz Lightyear de cuatro metros de altura que se ve en la foto de arriba. A partir de ahí hay que dejar volar la imaginación y dejarse sorprender por los juguetes que te vas encontrando por el camino. En cuanto a las atracciones, Zizzag Spin replica el poder saltar a lomos de Slinky, el perro salchicha de la saga, mientras intenta alcanzarse la cola.

RC Racer es lo más parecido a una lanzadera en forma de U donde el coche de juguete teledirigido se propulsará para salir volando por los aires. Por último, Parachute Drop se centra en el ejército de soldaditos de plomo de Andy. Consiste en poder vivir desde el aire algo parecido a tirarse en paracaídas, aunque a mayor velocidad, desde 25 metros de altura y sentados en un artilugio impresionante con barra de seguridad.

En definitiva, un nuevo espacio Disney para animar a los turistas a visitar el parque, salir de la crisis y recuperar su posicionamiento. Eso sí, han pagado un coste: 17 meses de trabajo, 150 ingenieros y 650 obreros para dar vida a este infinito.

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