Pamplona es una ciudad conocida a nivel mundial por las fiestas de San Fermín. De hecho, hace sólo unas semanas, la ciudad celebró las fiestas de San Fermín Txiquito. Sin duda, la oferta de entretenimiento que se vive durante esos días es intensa, sin embargo, los gigantes tienen un protagonismo muy importante ante la mirada atenta de los niños que disfrutan con sus bailes y su elegancia majestuosa.
Con la llegada de las fiestas de San Fermín todavía en la memoria, Pamplona se viste una vez más de fiesta para celebrar San Fermín Txiquito. El 7 de julio Pamplona se convierte en la anfitriona de la diversión en el mundo durante nueve días pero ahora, en el mes de septiembre, este fin de semana nuevamente es especial gracias a este santo que protege a los navarros con su manto.
Las fiestas de San Fermín tienen un eco que trasciende fronteras desde que el escritor Ernest Hemingway visitase la ciudad en varias ocasiones. Todos aquellos que no hayan visitado Pamplona y quieran hacerse una idea del ambiente que se respira pueden leer su novela: Fiesta. Sin embargo, a veces, sólo se habla de la fiesta de noche, de los conciertos que tienen lugar en diferentes plazas de la ciudad o de los conocidos encierros que son retransmitidos desde hace años por Televisión Española. Sin embargo, y como no podía ser de otra manera, la fiesta también se respira de día, porque San Fermín, es especialmente, una fiesta para la familia.
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