Inventarse historias, compartirlas con sus amigos, hacer que los muñecos se conviertan en personajes reales y, además, poderlo enseñar los padres, es algo que va casi intrínseco en el desarrollo de la creatividad infantil. Pero todos estos elementos sólo hacen llevarnos a un mismo lugar: el teatro creado por niños.
Uno de los temas que siempre están en continuo debate y que parece que sigue sin entrar en la conciencia de todos los padres, es la seguridad de los bebés en los automóviles. Bebés que viajan en los brazos de los padres, en sillas inadecuadas o mal sujetados, son solo algunos de los fallos que cometemos los progenitores a la hora de viajar con los pequeños. Errores que, como ya vemos cada día en las estadísticas más negras de nuestra crónica, se pagan muy caros.
Cada vez son más las recomendaciones y advertencias que se nos hacen cuando vamos a viajar con niños en nuestro propio automóvil. Hace solo unos meses que ya nos llegó la noticia de que el bebé debe ir siempre al contrario de la marcha del coche, así nos evitaremos muchos sustos y accidentes evitables. Por eso la tecnología y las empresas de diseño y fabricación de enseres para bebés no dejan de idear nuevos inventos que nos faciliten la vida, al mismo tiempo que protegen a los más débiles.
La seguridad de nuestros hijos cuando viajamos es un tema serio. En España, el 37 por ciento de los niños fallecidos en 2010 tras un accidente de tráfico no llevaba sillita ni cinturón de seguridad. Tampoco es suficiente con comprar una sillita para el coche, tenemos que asegurarnos de ajustarla correctamente al asiento y abrochar el cinturón de seguridad. Por supuesto, es fundamental, elegir una que cumpla todos los requisitos de seguridad.
La seguridad de los niños en el coche es un tema sobre el que hablamos a menudo, pero no por reiterado deja de ser importante. En estos días se producen el mayor número de desplazamientos en coche del año y los padres deben ser firmes a la hora de viajar con sus hijos. Incluso en desplazamientos cortos, del apartamento a la playa, los sistemas de retención infantil son imprescindibles.
La trona para comer bien seguro, el cochecito último modelo con el que pasear a la moda, los juguetes que estimulen sus sentidos, la ropa de pasarela y, a poder ser, ecológica, zapatitos, artilugios para el baño, libros para padres, nanas para dormir y hasta el último espectáculo de teatro con el que iniciarle al mundo de los sentidos; queramos o no, todo nos parece poco para nuestro pequeño-gran rey de la casa.
Ayer comentaba algunas cosas que me sorprenden de los productos para bebés, y como decía al final, no he tenido que pensar mucho para acordarme de más. Por ejemplo, si los bebés deben dormir sin almohada porque es un riesgo de muerte súbita, ¿porqué todos los juegos de sábanas de cuna incluyen una monísima funda de almohada?. Los padres más mañosos les dan utilidad, las utilizan para guardar ropa y que no amarillee, para guardar juguetes o como adaptador para la bañera. En la página de Ana Durán tienes algunas ideas.
Hoy se ha hecho público el informe 'Panorama de la Seguridad Infantil en el Automóvil (1990-2009)'. De los datos presentados hay uno que hace reflexionar: cuatro de cada diez niños menores de 14 años fallecidos en accidente de tráfico no llevaba puesto el cinturón de seguridad. Y digo que son datos para reflexionar ya que desde el año 2006, el uso del cinturón es obligatorio para todos los menores que viajen en coche.
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