
Arnidol siempre conmigo
Ayer miraba a mis peques mientras jugaban en la playa con otros niños. Además de deleitarme con la suerte que tengo, les escrutaba los cuerpecitos para comprobar que todo está bien -¡uy, mira papá ese lunar es nuevo!... Pero me di cuenta de algo más, mis niños tienen menos cardenales de lo que, por comparación con el resto, es normal. Debe ser que hay mamás que aún no conocen Arnidol.