Ya tenemos el Día de la Madre casi encima y quizás no se nos haya ocurrido ningún regalo que hacerle a mamá. Aunque es seguro que a ella le encanta que le digamos cuanto le queremos, tampoco está de más darle un pequeño regalo para demostrarle lo mucho que nos preocupamos por ella. Y si encima está hecho con nuestras propias manos, entonces mucho mejor.
Anoche el salón de mi casa, supongo que como la mayoría sobre todo si hay niños, se llenó de serpentinas. Me da pena tirar tanto papel de colores y por eso he mirado en internet si hay alguna forma bonita de reciclarlas. He encontrado varias, las más sencillas y vistosas para hacer con los niños es convertirlas en preciosas cajitas, donde luego podrán guardar sus pequeños tesoros, o en divertidos broches. También podemos guardarlas para cuando necesiten añadir toques de color en sus manualidades.
Ya hemos dicho en otras ocasiones que para mantener entretenidos a los niños lo mejor es buscarles tareas divertidas y en las que puedan poner en marcha sus dotes imaginativas. Es por esto que las actividades manuales son un buen ejemplo para fomentar la creatividad, así como potenciar la destreza manual.
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