
La leche entera es la opción más saludable para los niños, en la siguiente entrada te contaremos las razones. Aquellos niños que consumen leche entera se encuentran más delgados y tienen mayores niveles de vitamina D que los que toman leches desnatadas o semidesnatadas. Esto se pudo saber gracias a una investigación que tuvo lugar en Canadá.
Seguiremos hablando de la mejor manera que puedes alimentar a los niños que no quieren ingerir lácteos. Aprovechamos para invitarte a leer el artículo anterior en el que hemos tocado el tema.
El mundo de la fama, la promoción y el artisteo, es especialmente llamativo y divertido para los niños. Ser famosos y conocidos más allá de nuestro propio círculo social, se ha convertido en una de las máximas aspiraciones de la población. La televisión, con su importante influencia, es una ventana magnánima que nos promete conseguir todo aquello que deseamos, así que no es extraño que los niños también se vean salpicados con esta imponente moda.
Los alimentos lácteos, como la leche o los yogures, son fundamentales en el crecimiento de nuestros hijos. Además del calcio, contiene potasio y magnesio, así como distintas vitaminas, sobre todo del grupo B, nutrientes necesarios para el perfecto desarrollo de nuestros niños. Sin embargo, según los últimos datos, los niños españoles no toman suficientes dosis de lácteos.
Como sabéis, la intolerancia a la lactosa se manifiesta en incapacidad para digerir este azúcar, o en su absorción parcial, de forma que da lugar a diferentes molestias provocadas por la fermentación. Esto ocurre porque las personas afectadas no producen una enzima llamada lactasa, o no lo hacen en cantidad suficiente; y es que la lactasa es la encargada de separar los dos azúcares que a su vez forman la lactosa. Algunas estimaciones apuntan a entre un 10 / 15 % de personas que podrían sufrirla en España (incluyendo niños), si bien es verdad que no siempre se diagnostica correctamente.
Debido a los cada vez más alarmantes índices de obesidad infantil, somos muchos los padres que nos planteamos hacer un control estricto de lo que comen nuestros hijos. Pero en ocasiones, podemos eliminar, debido a modas sin valor científico, alimentos que, como la leche de vaca, son fundamentales en las etapas de crecimiento y sustituirlos por otros que no cuentan con las mismos valores nutricionales. Esto es, al menos, lo que asegura un reciente estudio firmado por el CSIC y la Universidad Complutense de Madrid y financiado por la Federación Nacional de Industrias Lácteas.
Después del susto de un cuadro de alergia a la lactosa en un bebé, a ningún padre se nos ocurriría darle sin preocupación un vaso de leche a nuestro hijo, aún cuando ya fuese un niño mayor o incluso, contando con la recomendación del pediatra. No obstante, este recelo tan normal como la vida misma, es según un reciente estudio avalado por el CSIC y la UCM, y patrocinado por la Federación Nacional de Industrias Lácteas (FENIL), infundado.
La semana pasada El Blog Infantil fue invitado a participar en un fantástico taller de cupcakes dirigido por Alma Obregón con bebidas vegetales Alpro, de Central Lechera Asturiana.