Los alimentos dulces no son los favoritos de los niños
Debido al creciente aumento de la obesidad infantil, los expertos se han puesto manos a la obra a fin de conseguir descubrir cuales son las causas principales de este elevado índice. Es evidente que la mayoría apuntan a la vida sedentaria y a una mala alimentación, que debería estar enfocada en la ingesta de verduras y frutas, teniendo como base nuestra sanísima dieta mediterránea.