¿Quién no ha jugado con los más pequeños con marionetas? A todos los niños les encanta escuchar las historias que les cuentan estos pequeños muñecos. Hoy quiero presentaros la manera de crear nuestro propio teatro de marionetas portátil. Así no habrá excusa para no jugar con los niños en cualquier lugar.
Que los niños aprendan un nuevo idioma es algo que ya está a la orden del día. En el mundo en el que vivimos, es importante que nuestros niños se puedan defender en otra lengua a parte de la natal. Especialmente el inglés es una herramienta estupenda para que las puertas de las nuevas tecnologías, por ejemplo, estén abiertas de par en par, eso sin hablar de que en nuestros desplazamientos turísticos, culturales o laborales llevamos la llave perfecta para entendernos con toda claridad.
Aunque no ha parado, del todo, la actividad teatral para los más pequeños, es ahora cuando, oficialmente, se inicia la temporada. La mayoría de teatros programan sus obras para los adultos, generalmente llenas de grandes figuras de la escena, estupendos actores y textos intensos e interesantes. Pero, casi ninguno de ellos, se olvida del público infantil, esos niños que acabarán siendo los espectadores del futuro y que, afortunadamente, han crecido con el mundo del espectáculo a su alrededor.
Ir a teatro a dejado de ser una actividad de adultos para convertirse en una diversión para toda la familia. Desde el recién nacido hasta el más anciano, tienen su sitio, especialmente guardado, en el patio de butacas de cualquier local donde la vida, desde un escenario, se reinventa y se exhibe. Risas y llantos, canciones y luces de colores o imposibles bailes con personajes imaginarios, son algunas de las maravillas que nos encontramos al levantarse el telón.
Para que los niños se diviertan en los viajes, lo mejor es ofrecerles ingredientes de diversión suficientes como para que no se aburran ni un segundo. Así que si lo que nos gusta es visitar las zonas antiguas, conocer museos o admirarnos de los grandes espacios arquitectónicos de la historia, tenemos que saber que los pequeños, seguramente, acabaran pidiéndonos una huida inmediata hacia cualquier otro lugar mucho más moderno y adecuado para ellos. Y es que el exceso de turismo cultural, a palo seco, a los niños les agobia bastante.
El Teatro de Marionetas (Nukuteater) de Tallin es un lugar ideal para visitar con los niños, el mismo se encuentra ubicado en una esquina de la época medieval, es un centro nacional de artes escénicas en la que participan más de veinte actores callejeros, talleres para adolescente y obras de marionetas todos los días pensadas para que los niños puedan disfrutar junto con sus familias.
El lenguaje gestual, la risa y la comedia son gestos universales que nos hacen entendernos y aceptarnos más allá de las propias palabras. Por eso "Far West" es una de las obras que más éxito está teniendo estos últimos días de verano en Madrid, ya que consiguen crear un ambiente de comicidad hilarante donde toda la familia encuentra motivos, más que suficientes, para divertirse rememorando las viejas historias del oeste.
El tiempo vacacional puede ser un buen momento para que nuestros niños empiecen a tener contacto con espectáculos y elementos culturales con los que amplíen sus ofertas lúdicas. Visitas a museos, conciertos, espectáculos de baile o el teatro, pueden ser algunas opciones que les ayuden, además de divertirse, a entender el mundo que les rodea de otra manera, al mismo tiempo que van creciendo en emociones y sensibilidad.
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