Verdades y mentiras sobre los piojos

Uno de los graves problemas a los que se enfrenta nuestro peque, especialmente con la entrada al colegio, es la del contagio de los piojos. Estos pequeños seres, demasiado molestos y causantes de tantos quebraderos de cabeza, son pasto de muchos mitos y leyendas, tantos que a menudo no sabemos donde empieza o acaba la realidad.

Lo mejor, sin duda, es la prevención, pero nos va a resultar un tanto complicado, sobre todo porque es lógico que tenga un contacto directo con los otros niños y de ahí puede venir el contagio. Pero ¿qué hay de verdad y mentira sobre lo que conocemos de los piojos?

• Los piojos no saltan ni vuelan, caminan muy rápido, por eso lo más fácil es que se propaguen a través de la ropa de la cama, de los cojines o los sofás.
• Aunque se alimentan de la sangre humana, pueden vivir fuera de la cabeza de nuestro niño hasta durante 24 horas.
• Aunque son muy molestos, los piojos no causan ningún problema de salud.
• Cuando un piojo entre en la cabeza se tarda entre 4 y 6 semanas en detectarse, ya que su saliva no la detecta nuestro organismo hasta pasado ese tiempo.
• Durante ese tiempo, entre el contagio y los picores, cada hembra pone entre 6 y 10 huevos o liendres al día, por lo que cuando lo detectemos la invasión puede ser inmensa.
• No es suficiente con eliminar los piojos desarrollados, también hay que acabar con las liendres ya que pueden tardar entre 7 y 10 días en salir.

Vía | Gaceta
Foto | Dfarmacia

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