Emociones que producen los chistes en la infancia

Emociones que producen los chistes en la infancia

Escrito por: Maite Nicuesa    12 marzo 2011     2 minutos

Las emociones pueden ser agradables o desagradables en relación con el efecto físico que producen. Por ejemplo, el miedo en muchas ocasiones, tiene el poder de paralizar el cuerpo. Afortunadamente, en los últimos años el estudio sobre temas emocionales hace tomar conciencia a cualquier persona de la importancia de aprender a vivir en contacto con la alegría y el pensamiento positivo. Términos que a veces, parecen utópicos, sin embargo, la felicidad empieza por enseñar a los niños a que aprendan a valorar más aquello que tienen en vez de centrarse en aquello que les falta. Sin duda, el humor refuerza la autoestima puesto que los niños descubren que se vive mejor en contacto con la risa. De hecho, la risa generalmente se produce en grupo, es decir, es una emoción que refuerza la amistad y el compañerismo.

Existe una tradición popular que es la de contar chistes. Bromas divertidas y anécdotas cotidianas que causan una sonrisa. Lo cierto es que es una forma de reforzar el ingenio es crear chistes o hacer bromas a partir de la propia creatividad e imaginación. Un chiste produce alegría de forma inmediata de tal forma que la positividad que surge de la risa actúa como un impulso para sobrellevar las dificultades cotidianas. El chiste muestra la capacidad del ser humano de utilizar el sentido del humor incluso en las peores circunstancias. De hecho, el propio Victor Frankl incide en la importancia que tiene el humor.


El humor produce alegría, causa optimismo, refuerza la paz interior, incluso, potencia la autoestima ya que en la medida en que el optimismo aumenta también crece el amor hacia uno mismo. Los padres siempre se preocupan por la felicidad de sus hijos. Lo cierto es que pensar en felicidad implica atender al mundo emocional de un niño. Por ello, nada mejor que aprender a gastar bromas, chistes y utilizar el sentido del humor constructivo en familia. De esta forma se alivian los conflictos y se resuelve más fácilmente cualquier tensión o cualquier diferencia en la comunicación.

Foto | Flickr-El Hormiguero