Deportes de elite

Deportes de elite

Escrito por: Leticia   @leticiadelpino    19 febrero 2012     2 minutos

Niños sobreexigidos por pertenecer al profesionalismo deportivo.

En ocasiones nos podemos llegar a preguntar si los niños deportistas de elite en realidad pierden el sentido de disfrutar lo que hacen por las fuertes rutinas y trabajo que deben cumplir.

Recientemente Arantxa Sánchez Vicario puso el tema en el tapete mencionando la mala relación que tienen los pequeños profesionalizados con sus padres, preocupándose en el por las familias que inculcan la competitividad insana.

Existen deportes en que se tuvo que cambiar el reglamento para poner un límite a sus padres. Clubes en que se les prohíbe la entrada a los entrenamientos y jueces que permitieron la emancipación de menores para evitar la mala influencia de los padres.

Cuando un pequeño empieza a practicar un deporte de manera profesional y empieza a trabajar para obtener éxitos deportivos la relación con su entorno (grupo familiar y amigos) puede llegar a verse alterado. Según los psicólogos deportivos pueden aparecer dos casos, un niño tirano (que domina a sus padres y amigos mediante el éxito) y un niño sobrepresionado (que sufre presión mediante las expectativas de los mayores y controles que normalmente pueden volverse asfixiante).

En el último caso el padre termina volviéndose una causa de estrés para los pequeños, quien empieza a vivir para satisfacer los deseos de los padres y no juega un torneo con la satisfacción esperada, sino que lo hace pensando que es una forma de obtener el amor de sus padres.

Es fundamental que las familias que tengan niños deportistas de elite pongan los pies sobre la tierra y que entiendan que las carreras de sus hijos no son la prolongación de sus vidas. Que compartan el éxito de sus hijos sin tomarlo como propio.

Vía | Sociedad El País
Foto | Flickr – Felipe Gil