Evitar la sobrecarga en las mochilas escolares

Evitar la sobrecarga en las mochilas escolares

Escrito por: Sacra    21 agosto 2010     2 minutos

Ya sólo quedan unas semanas para la vuelta al cole, la mayoría de nosotros ya andamos buscando las mejores ofertas para que este regreso a la normalidad escolar no nos salga por un ojo de la cara. Lo queramos o no, septiembre es el mes del exceso en los gastos y, por cada niño que acude a la escuela, tenemos que desembolsar una cantidad, generalmente, importante. Libros nuevos, uniformes y diverso material que, dependiendo de la habilidad del niño para su cuidado, puede ser más o menos eterno, dentro de este material necesario se encuentran las mochilas.

Más allá del diseño, la moda o la estética, es importante que prestemos especial atención a otros detalles, más importantes para su salud, como el peso y las medidas. A fin de que su columna vertebral no se resienta debemos buscar aquellas adecuadas que se ajusten, de forma anatómica, a su espalda. Afortunadamente, en la actualidad, son muchas los niños que optan por llevar todo el peso de sus libros en mochilas con ruedas que, si bien pueden resultar algo engorrosas donde existen escaleras, son mucho más beneficiosas para su salud física.

Según se ha comprobado el peso que soporta un escolar a su espalda es de unos 8 kilos, es decir, el doble recomendado por los médicos que estiman que la espalda infantil sólo debe cargar con un máximo de un 10 por ciento del peso total del niño. Este peso, según estudios realizados por la Federación de Padres y Madres de Francia, estaría repartido del siguiente modo: de 3 a 4 kilos y medio en libros, 2 kilos de material y de 2 a 3 kilos en la propia mochila.

Para aliviar el peso en la mochila de nuestros niños podemos emplear ciertos trucos. Primero debemos enseñarles a organizarse, es decir, no cargar con libros o material innecesario que no vayan a utilizar ese día, de este modo conseguirán aligerarse de peso. Utilizar cuadernos y carpetas ligeras, mejor de tapas blandas que de cartón o metal. Optar por los diccionarios o libros de consulta más ligeros, tipos de bolsillo e incluso, enseñarles a dejar en clase, aquellos que no necesiten transportar cada día. Afortunadamente, para este tipo de consultas cada vez se utiliza más el soporte informático por lo que nos evitamos una carga extra para la espalda de nuestro niño.

Vía | Con mis hijos
Foto | Guía Infantil