Los niños creen en la vida eterna ¿por qué?
Acaban de llegarnos los resultados de un estudio que se ha realizado en Boston, Estados Unidos, en el que se ha elegido un tema especialmente espinoso y bastante complicado, sobre todo cuando se trata de exponérselo a los niños. ¿Existe vida antes de la propia vida?
Hasta ahora se pensaba que el concepto de eternidad, de transcendencia espiritual o de alma inmortal, era algo impuesto por las distintas religiones y culturas que, en mayor o menor medida, y utilizando conceptos más o menos globales, la ofrecían como explicación a una serie de hechos que, al parecer, se le escapan al mundo de la ciencia. Sin embargo, este experimento realizado con niños de Ecuador, parece desmontar esa idea, abriendo una nueva vía a la concepción de que nuestra idea de eternidad podría ser innata.
Niños de ciudad y niños indígenas
Para llevar a cabo esta investigación se tomaron niños ecuatorianos de dos zonas diferentes: un grupo lo formaban niños de la ciudad de Quito, cuya orientación religiosa era la católica mayoritariamente; y por otro un grupo de niños indígenas, concretamente los shuar, que viven en la cuenca amazónica. Estos últimos no tienen ninguna creencia religiosa, y mucho menos en torno al concepto del alma o de la existencia de vida más allá de la propia vida.
A ambos grupos se les enseñaron una serie de dibujos en los que se mostraba a un bebé, a una mujer, y a la misma mujer embarazada. La idea era saber la opinión de los niños si existía una pre-vida. Contra todo lo que pudieran prever los científicos, las respuestas de los niños fueron similares. Al parecer, y según opinaron, ya existían antes del embarazo, aunque no tenían un cuerpo físico y eran incapaces de recordar, sí sentían emociones que podían ser positivas o negativas dependiendo de lo que surgía a su alrededor.
La idea de eternidad es innata
No podemos olvidar que la religión católica no contempla una vida antes de la gestación, y en el caso de los indígenas, precisamente por estar tan en contacto con la naturaleza y los ciclos de vida y muerte, tampoco existe ese vínculo. Sin embargo, con este estudio, en el que participaron más de 280 niños, todas las teorías se fueron al traste.
Las conclusiones que han deducido los especialistas es que, del mismo modo que existe una capacidad innata para aprender a hablar o a alimentarse, también podría existir esa idea de eternidad, de que una parte de nosotros es inmortal e imperecedera, dejando a un lado la creencia de que viene influida por la cultura en la que nos desarrollamos cuando somos niños.
Vía | Tendencias 21
Fotos | Foros de la virgen y Comuniones
Comentarios cerrados