¿Qué es la pediatría social?
El análisis de la salud puede abordarse desde distintos puntos de vista. Además de poner el foco en la atención, evaluación y seguimiento del bienestar de un niño, también es posible poner en relación la realidad del peque con el contexto social del que forma parte.
La pediatría social es una rama de la ciencia médica que la integra. Existen distintas variables externas que inciden de forma directa en las circunstancias del propio niño. Por ello, el análisis de la salud adquiere una perspectiva holística y global desde la perspectiva de esta disciplina médica.
Cómo influyen los aspectos externos en la salud infantil
Al comprender el escenario social es posible entender mejor la realidad del menor puesto que existen aspectos que están íntimamente relacionados. Por ejemplo, el bebé forma parte de una familia con dinámicas, rutinas y hábitos concretos. La sociedad va más allá del ámbito familiar, puesto que el niño también se relaciona con otros compañeros en la escuela infantil y forma parte de un barrio en el que viven más vecinos. Sin embargo, el núcleo familiar es la primera expresión del contexto social de un ser humano desde su nacimiento. El niño interactúa y se relaciona dentro de un escenario que puede estar condicionado por distintas oportunidades pero, también, por otras debilidades.
Más allá de la dimensión individual de un menor, existen otros factores ambientales y sociales que pueden influir en el nivel de bienestar de quienes forman parte de este grupo de edad. Por ello, cuando el experto realiza un diagnóstico de la salud del paciente, y analiza posibles causas, también tiene en cuenta esta dimensión global. Ya que algunas de estas causas se enmarcan en este contexto externo. Por ejemplo, el ruido frecuente y la contaminación pueden influir de manera negativa en el bienestar infantil. Los factores económicos también son relevantes en el ámbito de la salud puesto que la pobreza incrementa la vulnerabilidad a nivel potencial. Los derechos infantiles no respetados, la violencia contra la infancia o la falta de estimulación del bebé son otros factores de alarma.
La importancia de la pediatría preventiva
Como bien explica la pediatría social, hay distintos datos externos que a nivel potencial condicionan la protección del bebé. Existen aspectos ante los que los expertos pueden aconsejar y guiar a las familias. Porque la pediatría también puede ser preventiva. Y el pediatra es el profesional que acompaña y orienta a padres y madres en una etapa tan importante de sus vidas: después de haber formado una familia.
La enfermedad de un niño tiene una perspectiva social, también, porque cuando se produce un diagnóstico en el paciente, este hecho tiene un impacto en su entorno más cercano. La salud pública es muy importante. Y existen instituciones que trabajan para proteger los derechos de la infancia. El bebé forma parte de la sociedad, pero en esta etapa, no tiene la autonomía que posee un adulto para cuidar de sí mismo. Por ello, los factores externos positivos y negativos inciden de manera directa en su realidad como ser humano.
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