Ofrecer a nuestros niños una buena alimentación es fundamental para su desarrollo durante todas las etapas de su vida. Es necesario que sigamos los consejos del pediatra y las pautas que nos vaya marcando con el fin de ir introduciendo los nuevos alimentos, pero ¿sabes cuáles son los más indicados para cada estación?
La meditación es una de las técnicas más antiguas y extendidas en el ser humano. A través de ella dejamos que nuestra mente se relaje, descanse y se recargue de energía para seguir avanzando en el crecimiento. Pero si para los adultos es absolutamente beneficioso que, de forma habitual, practiques la meditación, también resulta ser una de las mejores medicinas para los más pequeños.
De sobra son conocidos los efectos nocivos que nos ofrecen ciertas sustancias durante el embarazo, no sólo a nuestro organismo si no al perfecto desarrollo del bebé. La cafeína o los refrescos de cola o bebidas energéticas no son nada recomendables a lo largo de la gestación. Pero también es cierto que son muchas las mujeres que necesitan estos ingredientes para sentirse activas, despiertas o sobrellevar el día con más energía. Entonces ¿qué pueden beber?
Existen muy pocos niños que van al colegio habiendo desayunando de manera completa (con leche, hidratos de carbono y frutas). Esto es bastante negativo ya que los pequeños que desayunan bien cuentan con más energía, enferman menos y no están tan ansiosos durante las clases.
No vamos a negar, a estas alturas, lo atractivo que resulta el chocolate para todo tipo de públicos. Desde bien pequeños hasta bien mayores este alimento es uno de los más apreciados, disfrutados y requeridos por el ser humano desde su nacimiento hasta el final de sus días, acompañándonos, además, en momentos de placer, de celebraciones o de situaciones especiales en las que compartir con buena compañía.
Y continuamos con nuestro periplo zodiacal a través del mundo de los astros y todo lo que nos cuentan sobre la personalidad de nuestro pequeño. Tras conocer las predicciones de los curiosos Sagitario, ahora le toca el turno a aquellos que nacieron entre el 22 de diciembre y el 20 de enero y cuyo signo corresponde a Capricornio.
Si tu niño ha nacido entre el 23 de octubre y 22 de noviembre tienes en tu vida el ejemplo más fehaciente del temperamento, la independencia y el carácter. Es un auténtico polvorín incapaz de quedarse quieto en cualquier lugar, ya incluso antes de empezar a andar verás como necesita de nuevos retos y movimientos arriesgados para sentirse totalmente feliz y satisfecho.