Verano: 6 ventajas de pintar y colorear en vacaciones

Durante el verano, es posible poner en perspectiva el aliciente de planes novedosos que rompen con la rutina. Sin embargo, también existen actividades sencillas que pueden llevarse a cabo durante todo el año y que, sin embargo, en este periodo, se desarrollan en un contexto que está acompañado por la calma y la tranquilidad. Pintar y colorear son dos propuestas sencillas, artísticas y creativas que tienen un valor atemporal. ¿Por qué el verano se convierte en un buen momento para que los niños plasmen su mundo interior sobre el papel?

1. Desarrollo de habilidades

Ante la llegada de las vacaciones de verano es habitual que surja el debate en torno a si los deberes son positivos para los niños o, por el contrario, conviene optar por otro tipo de actividades. Pues bien, pintar y dibujar son experiencias que, además de disfrutarse desde un punto de vista lúdico, favorecen el desarrollo de nuevas habilidades.

2. Paisajes, formas, perspectivas y propuestas de temáticas estival

El verano ofrece una nueva perspectiva en relación con el proceso creativo. Es posible explorar otros paisajes, formas, perspectivas y propuestas que conectan con los colores, las imágenes y otros detalles que son típicamente estivales. Por tanto, además de promover el desarrollo de la imaginación, pintar y dibujar en verano también son claves para mejorar la observación del entorno.

3. Dibujar y pintar al aire libre (o en casa)

¿Qué otras ventajas aporta el placer de dibujar y pintar durante el verano? Es una forma de entretenimiento flexible, sencilla y versátil. Una propuesta de ocio que tiene un gran potencial. Y es que, no solo puede desarrollarse en casa, o en una academia que imparte clases de dibujo o pintura para niños, sino que también se disfruta al aire libre (durante los largos días estivales).

4. Crear una colección de recuerdos a lo largo de las vacaciones

Aquellos proyectos en los que el niño se implica directamente tienen un valor añadido para él. Pues bien, pintar y dibujar son procesos que conectan con el potencial creativo y expresivo del niño que da forma a una composición a través de su propia perspectiva. Las obras que lleva a cabo durante las vacaciones se convierten en un verdadero legado. Y es que, algunas de esas obras pueden ayudar a crear un rincón artístico.

5. Atención y concentración

Hay muchos estímulos que pueden interferir en la concentración de los niños. Sin embargo, pintar y dibujar, por el contrario, promueven la atención y la concentración. Cuando los niños se implican en un proyecto que tiene la forma de un proceso, y la experiencia despierta su interés, disfrutan y aprenden.

6. Bienestar, calma y relajación

A lo largo del verano, los niños llevan a cabo distintos tipos de actividades. Pues bien, es esencial que haya momentos de calma y relajación. Pintar, colorear y dibujar aportan un agradable bienestar.

El verano, y las largas vacaciones estivales, ofrece un contexto emocional propicio para disfrutar, crear, pintar y dibujar.

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