Ayer, domingo día 10 de mayo, pudimos disfrutar de una magnífico día lleno de juegos, actividades y música en familia, y todo gracias a Nutella que ha organizado una serie de actos que recorrerán toda España
¿Quién ha dicho que el rock and roll no es para niños? La música es el lenguaje universal por excelencia, a través de ella comunicamos emociones, sensaciones, pasión y alegría, mucho más allá de cualquier género musical. Pero si encima nos sirve para divertirnos, bailar con libertad y compartirlo con la familia, entonces tendremos una actividad de lo más completa para que tanto los peques como los adultos encuentren su mejor forma de expresión.
Cada vez el mundo de los niños y los adultos encuentra más espacios en común para disfrutar del ocio y la diversión. Los padres de ahora no se conforman con sentarse en una butaca frente a una obra de teatro infantil o disfrutando de las últimas aventuras Disney en la gran pantalla, también necesitan que aquello que ellos aman, siguen y con lo que se sienten vibrar, forme parte del universo cultural y artístico de sus hijos. Por eso esta idea nos parece fantástica y así reafirmar que "los viejos rockeros nunca mueren", ahora además se entregan a los más pequeños.
Ya hemos visto como los campamentos pueden ser una buena elección para que los niños disfruten de un buen verano. Los hay de muchas temáticas, y no estaría mal pensar, antes de elegir, cuales son los gustos o aficiones de nuestros hijos para, de este modo, no caer en el error, tan común en mucho padres, de elegir por ellos lo que a nosotros nos gustaría pero que, a menudo, no coincide con los de ellos. Así que habrá que preguntarles, asesorarles, pero dejar que su tiempo libre lo disfruten a su manera y con aquello que más le gusta.
Cuando hablamos de espectáculos musicales dirigidos al público infantil, no podemos más que imaginarnos esas historias clásicas que siguen manteniendo asombradas a generaciones y generaciones. "Sonrisas y lágrimas" o "Annie", siguen manteniendo la llama viva a pesar del tiempo transcurrido.
Una vez confirmado que el efecto Mozart no existe, no hay porque limitar la música que escuchan nuestros niños. Cuanto mayor sea la variedad mejor será su cultura musical y tendrán un mayor criterio para definir sus gustos. El rock & roll suele gustarles mucho, es un ritmo facilmente bailable, algo a lo que pocos niños se resisten.
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