Principales características del vínculo entre abuelos y nietos

El vínculo entre abuelos y nietos adquiere una visibilidad significativa en el calendario en este día. Es decir, en esta fecha del mes de julio celebramos el Día Mundial de los Abuelos. Un acontecimiento que nos lleva a poner una atención especial en un vínculo afectivo que destaca por las características que mencionamos a continuación.

1. Distancia generacional: clave en la relación entre abuelos y nietos

Es uno de los factores visibles en la relación que une a un abuelo y su nieto. La diferencia de edad muestra la pertenencia a distintas generaciones. Sin embargo, así como la capacidad de aprendizaje está muy presente en la infancia, los abuelos actuales también son ejemplo de una rápida adaptación al cambio (como muestra el uso de las tecnologías).

2. Recíproca

El amor, el afecto y el cariño no avanzan en una única dirección, sino que ponen de manifiesto la reprocidad que existe en el vínculo entre abuelos y nietos. Cada uno aporta su esencia a la relación. Y los diferentes ingredientes se complementan.

3. El vínculo entre abuelos y nietos es muy especial

Cada vínculo afectivo es diferente en sí mismo, en consecuencia, es recomendable no establecer comparaciones. Sin embargo, la forma en la que los abuelos hablan de sus nietos es un síntoma de lo especial que resulta un vínculo que también es enriquecedor para los niños. Más allá de la diferencia de edad o la distancia generacional, los abuelos desempeñan diferentes roles en su vínculo con los nietos: son cuidadores, destacan como grandes narradores de historias, unen a todos los miembros de la familia, juegan con los peques…

4. La relación entre abuelos y nietos es dinámica

La relación entre abuelos y nietos cambia y evoluciona a lo largo de los años. El vínculo se amplía en la adolescencia, por ejemplo. En ese instante, el adolescente prefiere pasar más tiempo en contacto directo con sus amigos (pero sigue necesitando la protección y la seguridad que le aportan su entorno familiar más cercano).

5. El amor de abuelos y nietos es trascendente

El amor que une a abuelos y nietos es trascendente. La distancia generacional que caracteriza al vínculo afectivo produce una consecuencia directa. En algún instante, el nieto se despide para siempre de una de las personas más importantes de su infancia. Y, más allá de la ausencia que queda a partir de ese instante, perdura la memoria de un amor incondicional que se transforma en una permanente presencia.

6. Nutritiva

No todas las personas se convierten en abuelas en algún momento. En ocasiones, se produce la circunstancia de que algunos niños no han tenido la oportunidad de conocer a sus abuelos. Pues bien, conviene indicar que el vínculo es nutritivo en sí mismo. Es decir, alimenta la autoestima, el bienestar emocional y la felicidad.

7. Libre de estereotipos

Existen muchas características que están presentes en los lazos que abuelos y nietos crean a largo plazo. Pero es una relación que, en realidad, no está condicionada por estereotipos o rasgos universales. Es decir, también existen excepciones a la norma. Cada vínculo afectivo, en esencia, es totalmente único.

8. Resiliente

Cuando abuelos y nietos tienen una relación positiva, y el entorno familiar propicia el encuentro entre ambos, el vínculo aporta grandes beneficios a cada uno de los protagonistas. La alegría, la ilusión, la complicidad, el reconocimiento, el amor y el apoyo que aporta el encuentro, eleva la resiliencia.

Generalmente, el vínculo entre abuelos y nietos es cercano, incluso cuando la relación se desarrolla a kilómetros de distancia y los encuentros más esperados se integran en periodos de vacaciones. El Día Mundial de los Abuelos es una fecha clave para rendir homenaje a figuras de referencia que merecen amor, apoyo, compañía y consuelo.

Psicología #abuelos #nietos