Enfermedades infantiles: Apendicitis

Enfermedades infantiles: Apendicitis

Escrito por: Belén    14 junio 2010     2 minutos

Aunque se trata de una infección que afecta más a los niños de 11 a 17 años, los menores de esa edad también pueden sufrir apendicitis. Es la inflamación de un pequeño órgano del tamaño de un dedo que está unido al final del intestino grueso. Se sitúa en la parte inferior derecha del abdomen, ligeramente por encima de la ingle. Si se bloquea el apéndice se hincha y se infecta. El bloqueo lo puede causar materia fecal, infecciones bacterianas y en raras ocasiones objetos extraños. La falta de fibra en la dieta puede favorecer su aparición.

La apendicitis suele provocar dolor alrededor del ombligo, vómitos, fiebre o febrícula e hinchazón de la tripa. El dolor suele aumentar y se mueve hacia la parte inferior derecha. También puede causar diarrea o estreñimiento. Se trata de una enfermedad que requiere atención inmediata porque hay riesgo de perforación del apéndice, lo que provocaría una peritonitis. Ésto es una complicación grave que no siempre puede prevenirse. Ante un dolor intenso de abdomen con fiebre hay que acudir al médico.

El tratamiento de la apendicitis es la extirpación quirúrgica del mismo. La operación puede ser tradicional, abriendo el abdomen o por laparoscopia. En cualquiera de los casos la recuperación es muy buena y como mucho el niño estará en casa en dos o tres días. Le darán antibiótico para tratar la infección y si es necesario un medicamento contra el dolor. En pocos días estará como nuevo.

En caso de peritonitis, también hay que operar al niño. El tratamiento será un poco más largo puesto que se trata de un problema más grave, pero tratado a tiempo, la recuperación también es muy buena. Sin apéndice el niño puede tener una vida normal, pues aunque es un órgano que produce defensas, no es imprescindible para la vida.

Si tu niño tiene dolor de tripa y fiebre, no le des medicación porque puede enmascarar los síntomas de la apendicitis y retrasar el diagnóstico. Lo que ya hemos visto que puede tener malas consecuencias. Tampoco apliques calor en la zona dolorida porque podría ayudar a la infección a propagarse. No le des nada de comer o beber hasta que le vea el médico. Ten en cuenta que la historia familiar predispone a tener apendicitis, sobre todo en los niños. Si en la familia hay más casos, debes informar al pediatra.

Vía | Kidshealth
Foto | Flickr-Fernando Lugo APC


un comentario

  1. tatis gusman losada dice:

    muchachas y muchachos y niños haganle caso alos docotres ami ya meoperando y eso es feov porfabormamases