Cine: 6 beneficios de los cortos educativos para niños y niñas

El cine puede descubrirse y vivirse en distintos formatos y experiencias. La duración de una historia adquiere una especial relevancia cuando se trata de elegir una propuesta que se adapte a la capacidad de atención del público infantil. Los cortometrajes infantiles, como indica el término, se caracterizan por su brevedad. Una brevedad que puede mostrar verdaderas obras de arte a nivel visual. Los cortos educativos pueden tener una gran proyección en colegios y escuelas. Pero también ofrecen un contenido interesante para un público familiar. ¿Qué beneficios aportan a niños y niñas?

1. Un mensaje profundo: lecciones que dejan huella

Los cortos educativos tienen un notable valor pedagógico puesto que su historia muestra un mensaje significativo en el espectador. Un mensaje que se convierte en una importante lección, enseñanza o reflexión sobre temas tan universales.

2. Entretenimiento y diversión

Al igual que ocurre con un libro, una película o una obra de teatro para niños, aunque un corto proporciona otros beneficios que se suman al propio entretenimiento, la diversión es un factor clave en sí mismo. Es una propuesta de ocio cultural, saludable y creativa que acerca a los niños al mundo del séptimo arte en un formato dinámico.

3. Valores universales y ejemplos interesantes

Transmitir valores a niñas y niños es un proceso constante. Un corto educativo puede convertirse en una semilla que da frutos a través de su mensaje y, también, en un alimento que muestra una nueva perspectiva de principios y factores humanos que están presentes en la educación que el niño ha recibido hasta el momento.

4. Concentración

Los cortos se caracterizan por su brevedad. A pesar de su formato breve, su núcleo, su desarrollo y su desenlace pueden destacar por la calidad, la coherencia, el interés, el entretenimiento y la credibilidad. Su formato breve propicia la atención y la concentración.

5. Diálogo y conversación

Un corto educativo, con frecuencia, se completa con un coloquio posterior. Es decir, la esencia de la historia, su evolución, desarrollo y desenlace, puede comentarse, valorarse y ponerse en común (en clase o en familia). Ese diálogo enriquece todavía más la experiencia que produce el encuentro con la obra desde el punto de vista del espectador.

6. conexión con el cine y la cultura

Los cortos educativos pueden interpretarse desde distintos ángulos y perspectivas como, por ejemplo, interpretación, localizaciones, personajes secundarios, protagonista, diálogos… Todos los ingredientes forman un conjunto clave que compone una historia que se adapta de forma amena a un público infantil que disfruta de la propuesta.

Por tanto, dentro de las diferentes experiencias que los niños pueden descubrir en relación con el séptimo arte, los cortos educativos merecen un lugar relevante en la oferta de ocio: tienen un mensaje profundo, fomentan el entretenimiento, aportan valores, favorecen la concentración y nutren el diálogo.

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