Es a partir de los cuatro meses cuando ya podemos introducir a nuestro bebé en el refrescante y nutritivo mundo de las frutas. Los zumos y las papillas van a ser su primer contacto con otro alimento diferente a la leche que mamá le ofrece y, generalmente, suele ser aceptado de muy buen grado por la mayoría de los pequeños.
Sacra nos hablaba no hace mucho de la importancia de compartir mesa y mantel con los niños a la hora del desayuno. Si lo hacemos podemos asegurarnos de que siguen buenos ejemplos y que desayunarán de forma equilibrada. Un estudio presentado en el XXX Congreso de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC), confirma estos datos. Los niños que desayunan sólos consumen el doble de bollería industrial que quienes lo hacen con sus padres.
No tengo nada en contra de los potitos, pero siempre he preferido las papillas caseras, supongo que como casi todas las mamás. Cuando la comida del bebé te pilla fuera de casa tienes varias opciones, recurrir a los mencionados potitos o preparar la papilla antes de salir y llevarla caliente para que cuando llegue la hora esté templadita.
Si podemos dedicar un poco de tiempo a la cocina seremos capaces de crear platos atractivos para los más pequeños e incluso conseguir que coman cosas que normalmente son impensables. La fruta, aunque la de verano es más aceptada, es imprescindible para una dieta sana y no siempre es fácil que la coman. Aprovechando que las buenas temperaturas están cerca hoy os traemos una deliciosa receta que hemos encontrado navegando por internet. Aunque tiene fruta, también mucho azúcar, así que debería ser sólo para tomar muy de vez en cuando.
Las firmas de potitos infantiles están de enhorabuena ya que el último grito en dietas es la del bebé. Un esquema alimenticio a base de los purés envasados destinados a los más pequeños de la casa. Ahora son también para los más mayores que quieran cuidar su cuerpo.
El plátano es una de las frutas que más gusta a los niños. Es rico en potasio e hidratos de carbono. Pese a lo que muchas veces se cree, un plátano no engorda y ayuda a eliminar líquidos. Para los niños es recomendable por la energía que proporcionan los hidratos. Además es una fruta con la que es fácil hacer interesantes y sanas recetas para toda la familia.
Cada vez son más los expertos que relacionan el comportamiento y aprendizaje de los niños con la dieta alimenticia que ingieren. Y el desayuno, dentro de esas pautas nutritivas, es uno de los más importantes a pesar de que a menudo, bien por no prestarle demasiada atención, por falta de tiempo o desconocimiento, nos saltamos ese momento tan importante del día.
Sabemos lo importante que es comer 5 piezas de fruta y verdura al día y lo dificil que es conseguirlo con muchos niños. Nos volvemos locos en la cocina intentando hacer las recetas más originales y atractivas. Unas veces lo conseguimos y otras el esfuerzo no ha servido para nada más que entretenernos en la cocina. Puede que este trabajo sea en vano.
La fruta, junto a la verdura, son alimentos básicos y esenciales en la dieta de los niños y no siempre son aceptadas adecuadamente. En la mayoría de los casos necesitamos de grandes dotes de imaginación para que nuestros pequeños asuman, con alegría, las dosis recomendadas en un equilibrado menú. Pero es cierto que, de entre toda la variedad de fruta que existe en el mercado, el plátano es una de las mejor aceptadas por el público infantil. Además es fuente de vitaminas y no requiere de condiciones especiales para su conservación. Podemos disfrutar de ella durante todo el año y se puede tomar de mil y una formas.
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