El yoga y los niños

El yoga y los niños

Escrito por: Sacra    3 febrero 2010     2 minutos

Una de las prácticas más saludables que podemos ofrecerle a nuestros niños es el yoga. Aunque parezca imposible que nuestra criatura, vivaracha y activa pueda mantenerse quieta y en silencio durante un buen rato, con una buena dosis de paciencia y suficiente estimulación por parte del profesor, no sólo vamos a conseguir que esté relajada durante un rato, si no que acabe descubriendo un nuevo método con el que sentirse más a gusto consigo mismo, tanto mental como físicamente.

Los expertos aconsejan que la mejor edad para iniciar a los niños en esta actividad es a partir de los 4 años ya que es cuando los pequeños empiezan a manifestar, y asentar, sus gustos y preferencias personales, ya disciernen y entienden lo que les gusta y desean, tanto para su bienestar como para su tiempo de ocio.

Los beneficios del yoga en los niños son infinitos. Básicamente les ayuda en su desarrollo ya que incide, especialmente, en el dominio físico y psíquico, tarea ardua que cualquier ser humano aspira a poseer a lo largo de su vida. Algunas de las ventajas que podemos observar son:

  • Desarrollo y destreza de los músculos motores, así como mayor flexibilidad en las articulaciones.
  • Mejora en las posturas de la columna vertebral.
  • Notable mejoría en los hábitos de la respiración.
  • Estimulación de la circulación sanguínea así como masaje de los órganos internos.
  • Mejora la autoestima, el relajamiento, desciende el nivel de estrés y aumenta el nivel de concentración.
  • La personalidad y el carácter aparecen más armonizados y, al mismo tiempo, se mejora la interacción y relación con los demás.

Los pilares fundamentales para que nuestro niño practique yoga es la motivación y el ánimo, por lo tanto, en el caso de la infancia es importante que se practique como si se tratara de un juego a fin de incentivarles. Como en otras técnicas, el trabajo conjunto entre el profesor y los padres es fundamental.

Vía | Guía Infantil
Imagen | Saborizante