
Las fiestas navideñas suelen caracterizarse, además de por disfrutar un tiempo de ocio especial, por preparar opíparos menús en los que solemos incluir alimentos que, por norma general, no tomamos durante el resto del año. El marisco, los turrones, los pescados y los frutos secos, se convierten en los reyes de la mesa, descubriendo exquisitos manjares preparados con todo mimo.
Un fin de semana muy especial, y ya inmersos en plena Navidad, puede ser la excusa perfecta para ir con los niños al cine. Precisamente aprovechando que estamos en fiestas, las carteleras se visten para recibir a los más pequeños. Además de los estrenos que hemos ido recibiendo en semanas anteriores, este viernes añadimos uno más a la larga lista. Así que acudir al cine puede ser un plan estupendo para cualquier día de fiesta.
No sólo es importante la caries en los dientes durante nuestra etapa adulta, intentar evitar que se dé la caries infantil también es algo de suma importancia. Y es que aunque no todo el mundo lo sabe la caries se puede desarrollar también en los dientes de leche.
Ya estamos en Navidad y todos los niños andan escribiendo su carta para Papá Noel o los Reyes Magos. La mayoría de ellos presentarán una interminable lista de deseos para ver colmados todos sus anhelos y, también, sus caprichos, algunos de ellos meramente superficiales y nada recomendables. Empujados por el consumismo compulsivo que nos azota en nuestra sociedad, los niños quieren más y más, y también los padres, envueltos en la misma dinámica, queremos conseguirles más y más.
La Navidad es la época ideal para hablar de valores, de solidaridad, de amor hacia el prójimo... Más allá de lo que las propias creencias religiosas nos puedan imponer, la tradición de estos días siempre va unida a una forma de ver, entender y vivir la vida de una forma mucho más íntima y cercana. Las familias se reúnen, los amigos, los conocidos... resultando ser la excusa perfecta para hacer un propósito de reflexión sobre nuestra forma de actuar.
Uno de los adornos que no puede faltar en ninguna casa en la que se celebre la Navidad es la corona. Se trata de un adorno que nos llega desde tiempos inmemoriales. Para aquellas culturas paganas, de hace siglos, este círculo que construían a base de hojas, ramas y flores, y que colocaban en sus mesas o colgados de sus puertas, significa el renacer de la naturaleza tras el periodo del invierno.
Como hemos dicho en multitud de ocasiones, los libros infantiles pueden ser la herramienta perfecta para que nuestros niños aprendan ciertos valores o comportamientos que son necesarios en nuestra convivencia. Ser generosos, empáticos o compasivos, son algunas de esas virtudes que debemos fomentar en nuestros niños, pero ¿cómo hacerlo para que lo entiendan si nosotros, a menudo, no sabemos poner las palabras exactas?: a través de los libros.
La Navidad es una época muy especial, y mucho más para los niños. Solo con disfrutar de las impactantes decoraciones que nos ofrecen las calles, de la luz y el color, de ese espíritu más jovial y simpático que se respira en el ambiente, ya sería suficiente para saber que nos encontramos en una época distinta y singular.
En los últimos tiempos se ha puesto muy de moda un tipo de bebidas que, a juzgar por la publicidad, tiene múltiples beneficios para recuperar la energía o darnos un aporte extra de ánimo y resistencia corporal. En muchos casos las asocian con beneficios para el deporte o, incluso, para mantener la mente despierta, una serie de ventajas que no lo son tanto a tenor de los perjuicios que provoca en la salud.