Hoy es el Día Internacional de los Voluntarios. Conviene indicar que el compromiso social también pone el acento en proyectos que tienen que ver con la infancia. En ocasiones, las personas dedican una parte de su tiempo a participar en tareas que mejoran la calidad de vida de los niños hospitalizados. En El Blog Infantil compartimos cinco formas de solidaridad.
Mañana celebramos el Día del Voluntario. Es una jornada que pone en valor la labor de tantas organizaciones y proyectos que son posibles gracias a la implicación solidaria de tantas personas que dedican una parte de su tiempo libre a esa misión. El voluntariado no solo es una actividad que inspira a los adultos, también es una visión que educa a los niños.
Bastante doloroso resulta que los niños, por unas u otras causas, tengan que ser ingresados en los hospitales. Sacarles de su ambiente habitual, de su casa y amigos, es uno de los golpes más tristes que puede recibir aquel niño enfermo que necesita de cuidados constantes y especializados. Por eso los centros sanitarios, cada vez más sensibles con las necesidades de los pequeños, intentan ofrecer espacios, actividades y juegos para que su estancia, más allá del propio drama de la enfermedad, se convierta en una reconfortante experiencia.
Bastante complicado lo tienen los niños que padecen una enfermedad y tienen que ser hospitalizados como para que, encima, se les cree cierta fobia y miedo al mundo de la medicina. Aun estando arropados por sus padres en todo momento y sabiendo que, la mayoría de los facultativos, tienen un trato especial con los pequeños, sigue resultando especialmente duro ver como su vida ha cambiado, radicalmente, y ha sido enclaustrado en un lugar que, en la mayoría de los casos, le resulta hostil.
Muchos niños necesitan en algún momento la ayuda de un profesor particular para dar unas horas de clases extraescolares a lo largo de la semana con el objetivo de reforzar determinados conocimientos. Sin embargo, en un momento de crisis económica en que el muchas familias tienen dificultades para llegar a fin de mes es necesario priorizar gastos y ahorrar dinero para hacer frente de forma positiva a la economía doméstica. De hecho, el precio de un profesor particular ronda los 10 o 12 euros. Por tanto, tal vez en este momento algunas familias no pueden permitirse contratar unas clases particulares para el niño.
Lo cierto es que la ayuda social es muy necesaria no sólo para mejorar el mundo que nos rodea sino que darse a los demás también es positivo para uno mismo en base a la propia felicidad. Existen organizaciones de todo tipo que necesitan de la ayuda de personal voluntario que pueda dedicar un tiempo a la semana a determinada función. En este sentido, muchas personas deciden apostar por colaborar con una ONG especializada en la salud infantil.
Sin duda, existen muchos ámbitos por mejorar en un mundo envuelto en constantes diferencias sociales e injusticias que permanecen vigentes incluso también en el mundo desarrollado. Afortunadamente, todavía existen personas que trabajan en favor de los más desfavorecidos gracias a proyectos que muestran el lado más humano de las personas.
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