
En numerosas ocasiones, cuando un lector se encuentra con un libro, no parte desde cero en la lectura de la obra. Es muy posible que, a través de diferentes referencias culturales, ya tenga algún conocimiento previo sobre la historia, el autor, los personajes, el lugar en el que está ambientada la trama... De hecho, existen diferentes recursos de información que proporcionan datos clave sobre un proyecto: reseñas, críticas literarias, acciones de marketing, datos disponibles en la portada...
Los objetivos de lectura son importantes para las familias con niños. La comprensión lectora potencia el entendimiento del texto y la asimilación de información nueva. Es una capacidad que se cultiva en el ámbito educativo, pero también puede alimentarse en el hogar. La implicación del entorno familiar es clave para acompañar al peque en sus primeras lecturas. En El Blog Infantil compartimos diez ideas para reforzar y mejorar la comprensión lectora en los niños.
El desarrollo de la comprensión lectora se afianza de forma gradual. Existen dinámicas y ejercicios prácticos que potencian el desarrollo de habilidades clave en la lectura. ¿Qué beneficios aportan?
La experiencia de la lectura adquiere un proceso de aprendizaje gradual. Por ello, conforme el lector tiene un mayor nivel de comprensión y de velocidad, avanza en la dirección de la lectura eficaz. Se produce en el instante en el que el niño comprende el significado del texto que centra su atención.
Existen distintas experiencias de lectura que se complementan mutuamente. La lectura intensiva es un formato utilizado en el aprendizaje de un idioma. Parte de la selección de un texto breve en el que el lector pone el foco de atención. Es decir, se lleva a cabo un análisis detallado de su contenido. El alumno puede profundizar en el tema central.
Una relación de pareja experimenta un punto de inflexión en el instante en el que nace un bebé. En ese momento, ambos dan la bienvenida a un nuevo ser y, también, aprenden un nuevo rol. El vínculo afianzado hasta entonces se transforma de forma significativa. Y puede que sea en este momento cuando las parejas descubren diferencias relevantes en relación con la crianza, los valores y los objetivos de esta etapa. Existe un ingrediente que mejora la felicidad familiar: la empatía.
El verano, con sus vacaciones, puede ser un momento ideal para que los niños se diviertan y, al mismo tiempo, sigan fomentando esas otras necesidades de educación y comprensión que no descansan durante su crecimiento, sea cual sea la época. Aunque tengamos más tiempo libre, los niños deben seguir fomentando esos valores que les van a acompañar a lo largo de toda su vida: el respeto, la empatía, la tolerancia.